La Chica de la Niebla - Parte II

——Cuando Me desperté, estaba acostado en una cama excesivamente lujosa.
Había tres criadas cerca de la cama, y en el medio un gran y musculoso anciano sentado en una silla en la espalda. Parecía que este anciano me había recogido cuando me derrumbé y me cuidó.
Todo mi cuerpo estaba adolorido. Cuando miré, ampollas que parecían quemaduras estaban por todo mi cuerpo.
¿Qué? ¿Qué pasó? No entiendo esto.
Mis ropas usadas fueron lavadas, cuidadosamente dobladas y colocadas cerca de mi almohada, pero no encontré esa espada. El anciano dijo, cuando me descubrió, que la espada no fue encontrada.
¿Esa anciana la robó? Desde el principio, ¿Fui engañado por esa anciana así? Tal vez mi cabeza fue golpeada con fuerza, y de alguna manera la memoria se fue.
Después de que se curaron mis heridas, me decidí a trabajar para ese anciano.
Aunque pensé por primera vez que el anciano era sin duda un líder de los ladrones, me sorprendió mucho cuando me enteré de que él era realmente el Emperador de Asmodin. Su majestad es un excéntrico con hábitos vagabundos, y en ese momento, los subordinados no sabían qué hacer.
Arrojé lejos mi antiguo nombre. Yo llevaba el nombre que el Emperador me había dado a mí.
Desde que comencé a trabajar para el Emperador, 4 años habían pasado, y fui elogiado extravagantemente como un “Espadachín Genio” por los que me rodean.
A pesar de que perdí esa espada, yo ya tenía talento con espadas. Cuando tuve una pequeña pelea con los militares del Reino de Lucifenia, tuve la oportunidad de que los soldados que conozcan mi nombre.
Mi juventud no fue un obstáculo para mi asenso. El emperador poseía la idea de que "Si tú eres fuerte, entonces todo está bien”, siguiendo la meritocracia.
Me sorprendió el hecho de que existiera un general de 9 años en Asmodin. Entonces esa chica seguramente—— Miriam Futapie, desde mi punto de vista también poseía una habilidad extraña. De alguna manera, la crianza puede hacer a una joven como esa.
De todos modos, gracias a los precedentes de Mariam, yo podría empujar fácilmente mi camino hacia el éxito. En el ejército que tenía tantos creyentes Levin, mi supervisor directo, el general Shalgham, era un creyente apasionado. Por lo tanto, decidí ocultar mi lugar de nacimiento, y gracias a la corriente de la meritocracia, no me habían preguntado en profundidad sobre ello.
Si eres fuerte entonces todo está bien, en este país....
Cuando conseguí algunos méritos de guerra, me dieron el título del país como apellido.
Pero incluso lo persona que soy— Yo sin duda dije que heredé la sangre del demonio.
Ese título, se suponía que deriva de uno de los “Cinco Duques” — antiguas celebridades de Asmodin.
Por casualidad o por el destino, el que me han dado es “Venom”, un título tomado de “Venomania”. Honestamente, aunque lo odiaba, los límites de no ser un creyente Levin significaban que no podía negarme a ese premio. Es más, me sentí tímido si yo de alguna manera preocupé el Emperador que me ayudó mucho, así que inevitablemente acepté el nombre "Gast Venom" desde entonces.
Los alimentos alineados en la mesa se convirtieron poco a poco en cosas maravillosas. Cada vez que los veo, mi corazón hierve con deleite y tristeza al mismo tiempo.
——Si yo hubiera llegado a este país un poco más temprano.
——Tal vez Sarah no habría tenido que morir.
En momentos me olvidé de mi hermana, yo nunca tuve una.
Nuestro padre no existía. Nuestra madre murió y nos dejó por nuestra propia cuenta.
Para mí, Sarah era la única en la que podía confiar.
Por lo tanto, estoy contento con todo.
Uhh, en las Montañas Nubladas nosotros pasamos por el camino para batallar con Lucifenia—
En esas ruinas, Sarah—
Tú, a quien yo pensé muerta, me reuní junto a.



~Agradecimientos a Luciano Ruiz~