Sateriasis despertó en un carruaje tirado por caballos. Parecía que se había dormido un poco.
“¿Estás despierto? Estabas teniendo muchas pesadillas.”
El gato rojo sentado en el asiento de al lado, dijo eso sin mostrar la más mínima preocupación, mientras miraba el paisaje cambiante por la ventana.
Afuera atravesando el campo idílico. Parecía que estaban cerca de la aldea de Abito. Sateriasis preguntó a I.R., a un lado de él, acerca de cuánto tiempo había pasado desde que salieron de Lasaland.
“Alrededor de una hora, más o menos. No teníamos que venir todo el camino en carruaje.”
“De todos modos, sigo siendo el Señor de estas tierras. Viajar a un pueblo vecino a pie no es bueno para mi apariencia—“
“¿Quieres preocuparte por ese tipo de cosas ahora? Simplemente al no llevar un solo sirviente junto contigo es lo suficientemente raro.”
“¿Lo es?”
El joven cochero rubio, mientras tira de las riendas del caballo, lo miró por un momento.
“... Oye, I.R.”
Sateriasis bajó de repente su voz y le susurró al gato rojo.
“¿Está bien para nosotros estar conversando normalmente así? Gatos parlantes, en Asmodean al menos, no son exactamente común.”
“¿Hm? Ah, está bien. Tú eres el único que puede entender mis palabras como una persona. Para el cochero, sólo eres un raro amante de los gatos.”
“... Eso es un problema también. ¿Por qué no vienes con la forma de una mujer joven?”
“El rumor se extendería si una mujer joven con antecedentes desconocidos viaja con el Duque. De todos modos, es más práctico para mí moverme al descubierto en esta forma.”
Hablando con un gato era ya algo para difundir rumores... Sateriasis se preguntó cuál sería la mejor opción. Bueno, I.R. ya dijo que era “más práctico” para ella, él aceptaría eso como una buena razón.
El carro viajó sobre grandes piedras a lo largo de la carretera y rebotó ligeramente.
A pesar de que los patrones de lluvia de la región Asmodean fueron bajos en general, el área de Lasaland fue una excepción; las precipitaciones fueron inesperadamente altas en comparación con las otras regiones. Por lo tanto, hubo varias aldeas agrícolas dispersas en las cercanías de una gran ciudad como Lasaland. Ahora, incluso el pueblo al que Sateriasis se dirigía, a Abito, era una de esas aldeas agrícolas.
“El pueblo de Abito, eh... ¿Alguna vez has estado allí, Duque?”
Era raro que I.R. pregunte a Sateriasis por algo.
“No... nunca he estado allí. Por lo menos, no se ha mantenido con mis recuerdos actuales.”
La memoria de Sateriasis no había vuelto completamente todavía. O más bien, no se había acordado en dónde estaban. Había tres cosas importantes que recordaba. Uno, que hizo un contrato con el Demonio de la Lujuria con la guía de I.R. Dos, que el culpable de la masacre en la mansión ducal no fue otro más que él, Sateriasis. Y tres, que hizo el contrato con el demonio para poder alcanzar a su--- Gumina. E incluso con los tres, él tenía que recordar todos los detalles.
El que mató a toda su familia, incluyendo a sus padres, era Sateriasis. No había duda de eso, pero sus propios motivos detrás no fueron bastante claros.
(Yo odiaba a mi familia... tal vez. De alguna manera, me acuerdo de ese sentimiento. Pero ¿Por qué iba a odiar tanto a mi familia?)
Incluso cuando le preguntó a I.R., que había presenciado el evento, ella no estaba dispuesta a decirle la respuesta. O para decirlo de otra manera, I.R. pasó por el incidente por pura casualidad y no sabía la causa que dio lugar a las acciones Sateriasis. Sin embargo, de acuerdo con I.R., cuando ella conoció por primera vez a Sateriasis en la mansión, él dijo que su motivo fue que él “quería a alguien para amarla.”
(El amor... Así es, amé a Gumina. Y entonces ella me dijo ese terrible rechazo. ¿Esa era la razón?)
Respecto a Gumina, además de su apariencia y su hiriente arrebato--- no podía recordar muchos detalles. Se sentía como si probablemente se hubieran conocido desde la infancia por un tiempo muy largo. Sin embargo, es sólo “cómo se sentía”, nada que pudiera ser probado.
(Pero, si ella era un vieja conocida, y tiene el pelo verde...)
Su madre también tenía el mismo pelo verde--- Es probable que ambos eran miembros de la Familia Glassred.
(Visitando a la Familia Glassred en un futuro próximo sería la forma más rápida de averiguarlo... pero soy reacio a ir.)
El Marqués Glassred--- incluso desde que la discusión sobre no contratar a ningún sirviente en la mansión, la relación entre Sateriasis y su tío había sido tensa.
(Sea como fuere, no importa qué, la cosa más importante que hacer ahora es resolver el problema en su mano.)
Por delante de su camino, ya podía ver la puerta principal de la aldea de Abito, una puerta de madera en mal estado. Sateriasis preguntó al gato rojo, que se aseaba a sí mismo a su lado.
“La chica con la jarra de agua que mencionaste antes... ella está en esa aldea, ¿verdad?”
“Sí, eso es correcto. Esa chica--- Mikulia Greeonio, es una campesina que vive en la aldea Abito.”
“Estoy bastante sorprendido de que fuiste capaz de encontrarla en un corto período de tiempo.”
“Es porque tengo conexiones con el gobierno de ese país. La razón por la que te convertiste en Señor y Duque tan fácilmente fue también debido a mis diversas acciones.”
I.R. se elogió a sí misma, mirando orgullosa. ¿Ella quería su elogio también?
“Bueno, debo darte las gracias. Pero yo ya era el heredero de los Duques, así que me hubiera convertido en el próximo Señor incluso sin tu ayuda.”
“... Compañero ingenuo.”
Sateriasis ligeramente levantó los brazos y los extiende para disipar cualquier somnolencia.
“Mhhhhhh. Mientras pensaba, todavía estoy un poco cansado.”
“Es porque te quedaste despierto toda la noche... tú parecías tener un montón de diversión anoche. ¿O debería decir, “anoche también”?”
“Lukana también. Ella debería estar durmiendo plácidamente en la cama de la mansión por ahora. Sobre todo porque ayer fue particularmente intenso.”
"Estoy bastante sorprendida de cómo fuiste en eso durante una semana y, bueno, no te cansas.”
“¿No fuiste tú quien me hizo así? ¿Eh? ¿Estás roja por casualidad?”
“¡Todo mi cuerpo ya es rojo!”
Sateriasis recordó el día cuando se acordó de cómo utilizar sus poderes. Utilizó al Demonio de la Lujuria para robar el corazón de Lukana. Con el contrato que se ha hecho con el demonio, Sateriasis ahora podría hacer suya a cualquier chica que ponga sus ojos en los suyos. I.R. dijo que, después de que él se acostumbre a utilizar el poder, él no tendría que sufrir una transformación demoníaca completa para usarlo.
Sin embargo, hay una condición para seguir manteniendo el poder. Eso es tener relaciones sexuales con la mujer sobre de forma regular. Si esto llegara a parar, el contratista sentiría un intenso aumento de lujuriosa pasión, y empezará a querer los cuerpos de las mujeres. Esta fue precisamente la razón por la cual Sateriasis tenía miedo de tener a alguien cerca de él cuando perdió sus memorias. Sateriasis también había pensado en hacer oficialmente su esposa a Lukana ante el público. Sin embargo, en la región Asmodean, o más bien todas las regiones del Imperio Beelzeniano, la monogamia era la norma. De acuerdo con los preceptos de la religión del estado, Levin, tener más de una esposa no está permitido.
La única meta de Sateriasis era alcanzar a Gumina, para hacerla su esposa. Así que no podía permitirse el lujo de casarse con Lukana, y si alguien llegara a descubrir que él mantenía una amante en su mansión, no sería muy fácil para él.
Lukana no era necesariamente vital para el sostenimiento del poder del demonio tampoco. Sateriasis siempre podía disolver su lavado de cerebro y enviarla de vuelta a casa. Él siempre podría encontrar algunas prostitutas locales para eliminar sus pasiones lujuriosas. Aun así, Sateriasis no tenía intenciones de dejar ir a Lukana.
(Me gusta Gumina, pero también me gusta Lukana. Tener solo una esposa es ridículo. ¿Qué hay de malo en amar a todas las mujeres que me gustan?)
Aunque Sateriasis pensaba así, él era sólo un Señor local al fin y al cabo. Él no tenía el poder de cambiar las leyes en este país.
A través de su transformación demoniaca, había alcanzado habilidades sobrehumanas. Sin embargo, no era suficiente para que uno se enfrente a todo el ejército del Imperio Beelzeniano. El poder principal del Demonio de la Lujuria era sólo la capacidad de atraer al sexo opuesto. Lo único que Sateriasis puede hacer por ahora era mantener a Lukana invisible, oculta en la mansión, donde sólo puedan disfrutar uno del otro en sus travesuras nocturnas.
Había un sótano en la mansión. Parecía que no se ha utilizado durante mucho tiempo, sin embargo, Sateriasis había perdido la memoria de todo esto y nunca había puesto los pies en el. Sin ningún tipo de ventanas, el lugar estaba aislado del mundo exterior, por lo que es el lugar perfecto para confinar a Lukana.
El espacio del sótano era comparable a la primera planta, así que el tamaño no era el problema, pero tenía un ambiente sin vida e insípido. Hizo que Sateriasis se sintiera reacio a confinar a Lukana allí. Dicho esto, ahora tenía una razón completamente diferente para no tener sirvientes en la mansión, por lo que habría que considerar cómo lidiar con esto.
Y todavía hay otras complicaciones. Por ahora, la familia de Lukana--- sus padres y su tío, deben notar que está desaparecida y empezarán a causar una conmoción al respecto. Tendría que pensar en algún tipo de solución para eso también. Que Lukana permanecía en la mansión de Sateriasis para hacer algo de sastrería era un hecho bien conocido. Si ella desapareció, definitivamente sospecharán de Sateriasis.
Pero parecía que I.R. ya ha encontrado una solución a ese problema. Cuando Sateriasis le pidió que le explique cómo era, todo lo que dijo fue que ella le diría después de que traten con Mikulia Greeonio.
(Mikulia Greeonio, ¿eh…?)
La muchacha campesina de cabello verde. ¿Por qué el hechizo no hizo su trabajo sobre ella en ese momento? Es una orden conocer la razón. Y Sateriasis tendría que “utilizar cualquier medio” para mantener a la persona que fue testigo de su cuerpo con la boca cerrada. Con eso, Sateriasis y I.R. pasaron por las puertas de la aldea de Abito.
~Agradecimientos especiales a Luciano Ruiz~
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