Capítulo 3: Gumina Glassred - Escena 5

Para Sateriasis, las relaciones con las mujeres ahora era lo mismo que comer y respirar: una parte normal de su vida cotidiana. Actualmente, hay cinco mujeres en el sótano de la mansión. Él jugaba con las cuatro (excluyendo a I.R.) por la noche, disfrutando del placer. Era debido al poder del demonio que habitaba en su cuerpo que no se debilitaba, por supuesto.

Sin embargo, si era sólo por eso, él no necesitaría varias mujeres como sus compañeras. No estaba claro si había una mujer en el mundo que pudiera dominar la extraordinaria lujuria de Sateriasis. Debido a eso, Sateriasis no robaba mujeres imprudentemente. Es precisamente por eso que él las amaba ardientemente a las cuatro, al igual que invitarlas a su mansión.

―― Para ser precisos, Mikulia era sólo un poco, debido al curso de los acontecimientos, pero todavía era parte de ella.

(Amar a más de una mujer al mismo tiempo. ¿Quién decidió que era inmoral? ¿La iglesia? ¿El gobierno? ¿O fueron los dioses?)

En cualquier caso, Sateriasis, quien había hecho un contrato con un demonio, no tenía ninguna razón para seguir eso. Después de que terminó su amorío con Mirigan ese día, un gato rojo apareció ante Sateriasis una vez que salió de su habitación.

"Parece que tienes un visitante, Duque."

Señaló la nariz al techo cuando ella lo dijo.

"¿Un visitante?"

"Lo vi en frente de la entrada principal, justo ahora. Es...... tu tío. Hay muchos otros que lo acompañan".

"¿En serio......? Eso es simplemente perfecto. He estado pensando que debía reunirme pronto con Lord Glassred".

Mientras él ponía su apariencia en orden, Sateriasis se dirigió hacia el primer piso. El Marquéss Glassred ya estaba esperando a Sateriasis en el hall de la entrada.

"Mis disculpas por haberlo hecho esperar, señor tío."

"¡Oh, Señor Sateriasis! Perdóneme por entrar sin permiso. Verá, esta mansión no...... tiene ningún sirviente, ¿verdad?"

¿Se supone que eso es una excusa o sarcasmo? Sin dejar que sus sentimientos ofendidos se muestren externamente, Sateriasis le dio la bienvenida con una cara indiferente.

(Como pensaba, no me agrada...... este hombre)

Se sentía como si el Señor Glassred exudara una característica de tosquedad de alguien que de repente se paraba por encima de ti en el mundo. No había nada que hacer al respecto, pero Sateriasis no podía soportarlo.

"Entonces, ¿Qué lo trajo aquí hoy?...... Tan tarde en la noche."

"¿Por qué? No he visto tu cara en un largo tiempo. He venido a ver cómo estabas buscando...... y también quería discutir algunas cosas."

Si ese era el caso, no había necesidad de que fuera esa misma noche―― Incluso que el Marqués Glassred estuviera aquí ahora sólo aumentaba la irritación de Sateriasis, pero había algo que quería saber de él. Así que, con paciencia lo dejó pasar.

"Por el momento, vamos a hablar en el salón."

Era la habitación de delante al doblar por la derecha de la entrada. Lukana la limpió y la regresó a su estado original antes de que se uniera al harén de Sateriasis y él no había estado en mucho tiempo, ya sea por limpiarlo y ordenarlo.

"Bueno, entonces, perdón por molestarte...... Gumina, vos también venís."

"¡Oh!"

(¿¡"Gumina"...... !?)

El mismo nombre que él estaba tratando de preguntar, acaba de salir de la boca del Marqués Glassred. Y luego, su rostro se asomaba desde afuera――.

"......Ha pasado mucho tiempo, Señor Sateriasis."

Un vestido blanco con una gran decoración floral. Pelo verde. Era la aparición de "Gumina" lo que él buscaba, lo que había imaginado en su mente.

La discusión por la que el Marqués Glassred visitó la mansión trataba simplemente de dar un informe sobre el continuo incidente de desapariciones de mujeres que ocurría en Asmodean. Por supuesto, Sateriasis era el que causaba el incidente. El Marqués no tenía la menor idea de que él era el criminal. Él había quitado los recuerdos sobre el problema de Lukana y Mikulia de las personas involucradas a través del "ritual" y se llevó a cabo al mayor cuidado posible para no dejar testigos. Así fue que, aunque era natural siguiera  su curso, Sateriasis estaba algo aliviado de poder confirmar lo dicho a partir de la propia boca del Marqués.

En lugar de las conversaciones sobre el incidente, los ojos de Sateriasis estaban puestos sobre la persona que trajo el Marqués, Gumina. Ella era una pariente de la Familia Glassred después de todo. Por el contrario, ella era la hija de su patriarca, el Marqués.

(A pesar de que estaba tan cerca, no me había encontrado con ella hasta ahora......)

Al ver los ojos de Sateriasis, el Marqués Glassred hizo una gran sonrisa mientras empezaba a hablar.

"¿Sus recuerdos habrán regresado, tal vez?"

"No...... no completamente todavía."

Parecería que la respuesta fue decepcionante para el Marqués; él no ocultó su expresión decepcionada.

"...... Entonces, sobre mi hija, Gumina......"

"Recordé su cara. Pero, nada más..... me había olvidado que era incluso su hija hasta conocerla realmente ahora".

"Realmente ahora...... Si es así, entonces traerla a ella era la respuesta correcta después de todo."

El Marqués Glassred miró hacia Gumina, sentada a su lado, y le habló.

"Gumina. Desde este día en adelante, vivirás junto con Lord Sateriasis."

"¿¡Qué!?"

"¿¡Qué!?"

Gumina y Sateriasis alzaron sus voces sorprendidas al unísono.

"No hay nada extraño en ello. Ustedes dos están comprometidos."

"¿¡Comprometidos!?"

(¿¡Gumina y yo...... somos prometidos!?)

Era una sorprendente revelación para Sateriasis, pero al mismo tiempo no tenía sentido. Después de haber perdido sus recuerdos, la conversación de Sateriasis con Gumina, a veces, resurgía de su mente. Durante la misma, ella miraba a Sateriasis con una mirada fría y hablaba abusivamente mal de él. ―― Si ambos se amaban, como él dice, entonces, ¿Qué fue eso?

Mientras Sateriasis y el Marqués Glassred conversaban, Gumina tenía un rostro más apático, manteniéndolo bajo y silencioso. ¿Esta era la actitud de una mujer delante de su prometido? En primer lugar, ¿Por qué ella no vino ni una sola vez a visitar a Saterasis hasta ahora? Si ella hubiera oído que su prometido había perdido sus recuerdos y a su familia, y se encerró en su mansión solo, ¿No debería haber corrido hacia él en primer lugar?

(¿Vos...... no me amas, Gumina?)

Tan pronto como eso surgió en la mente de Saterasis, estaba en conflicto entre un cariño irresistible hacia Gumina y un odio feroz por ella.

(¿¡Qué...... había pasado...... entre Gumina y yo!?)

"¿Qué pasa Señor Sateriasis? ¿Se siente mal?"

A través de las palabras del Marqués Glassred, Sateriasis regresó a ellos.

"Oh...... sí, perdóneme".

"Voy a hacer que envíen las pertenencias de Gumina inmediatamente mañana a la mansión."

"No...... por favor espere un momento."

Con los pensamientos confusos de Sateriasis, él se negó ante la propuesta del Marqués Glassred. Allí estaban las mujeres en el sótano. Una vez que Gumina venga, ellas se encontrarían inmediatamente y él sería expuesto.

"Lo he dicho desde el principio. Quiero vivir en esta mansión solo por el momento."

"¡A pesar de que digas eso......! ¡A pesar de que me enteré de que habías empezado salir a la calle de nuevo recientemente......!"

"Esa es otra historia. De todos modos, denme...... un poco de tiempo."

"Tal pobre sentido...... ¡Señor Sateriasis, usted es el que debe gobernar Asmodean! ¡¡Incluso usted debe entender el mal aspecto que usted tiene en ese estado!!"

El Marqués Glassred se levantó y gritó enojado a Sateriasis. El silencio siguió por un corto tiempo. Incapaz de soportar la atmósfera incómoda, Gumina abrió la boca por primera vez.

"Padre...... El Señor Saterasis puede estar más angustiado sobre estas circunstancias intensas de lo que habíamos pensado. Forzarlo ahora sería un poco――”

"¡¡Vos cállate!!"

Furioso por el consejo de su hija, el Marqués Glassred dirigió su ira hacia Gumina. Pero, gritarle a su hija lo calmó de alguna manera. Él hizo un gran suspiro con un "Hauuu" y volvió a sentarse en su silla con un sonido fuerte.

"...... Aún así, tienes razón. Sin embargo, Señor Sateriasis. Usted debería reunirse a veces con Gumina. Usted tenía una relación con mi hija desde muy jóvenes. Podría haber una posibilidad de que usted recupere sus recuerdos si hablara con ella."

Incluso Sateriasis quería eso. Habían muchas cosas que quería saber de ella.

"¿Eso estaría bien para vos...... Gumina?"

Gumina asintió a la pregunta de su padre, aprobándolo.

"Bueno...... ahora, entonces, si nos disculpa. Tengo asuntos políticos que atender en la mañana. Disfrute de su tiempo libre antes de que sea demasiado tarde. Lo que estoy haciendo ahora es por usted, Señor Sateriasis―― no, Duque Venomania, debe hacerse tarde o temprano."

Después de hablar con sarcasmo, el Marqués Glassred eventualmente salió de la mansión junto con Gumina y sus sirvientes.