sábado, 11 de noviembre de 2017

Epílogo

Cuando el chico se levantó sobre la tierra, ahí ya no había nada.

A dónde había llegado a parar él? Si tuviera que responder provisoriamente a esa pregunta, hay dos posibilidades.
La primera, la luna.
Después, la otra posibilidad es el Paraíso.
Prácticamente, se puede ver en el cielo negro la luz tenue que porta la luna llena consagrándose.
Como si el Rey de la Noche, posiblemente pareciera un Dios.
Sin embargo, pienso que aparecerá un gobernante diferente del cielo cuando la forma de la luna sea borrada.
La brillante y resplandesciente estrella es... el sol.
En este mundo, hay algo llamado el Dios del Sol.
Pero hay algo extraño, el sol no fue establecido como la residencia de ese dios, sino que fue la luna.
El Dios del Sol vive en la luna... Tal vez, eso significa que, probablemente ese fue el principio de la distorsión original...
El chico pensó de esa manera.
Si originalmente se supone que la luna tenía un dueño diferente, el Dios del Sol que está ahora... Aquel al que llaman "Sickle"... ¿Por qué permaneció allí? Además de eso, nadie hasta ahora pensó sobre esa incógnita.
"¿A dónde se fue la Diosa de la Luna?"
Esa respuesta, al menos debe saberlo Sickle.
Sin embargo, eso nunca se lo contó a nadie.
Hasta ahora.
El chico sólo se levantó sobre la tierra para volver a inspeccionar.
Igualmente, no había nada que hacer en ese desierte infertil, pero si se escucha con claridad, se puede escuchar el débil sonido ondulante del agua a la distancia.
"Castigo" destruyó todo, pero tal parece que no pudo secar por completo el extenso mar.
Hablando del opuesto, ese mar sin lugar a dudas se convirtió en el origen del gran sufrimiento del mundo.
Toda la región de Evillious fue completamente inundada, debido a que Castigo provocó una gran inundación.
A partir de ese momento, la humanidad no estaba cuando se tuvo que preparar para utilizar el Arca para escapar.

... Ellos siempre cometieron errores.
En este período de 1000 años.

-... No, ellos no. Tal vez nosotros...-

El chico, deslumbrantemente hermoso, rió burlonamente un poco.

El sonido de las olas no es algo que se pueda detener.
Sin embargo, ese no es el único sonido que se podía escuchar.
... La voz, de las personas.
Naturalmente, eso es imposible.
Se supone que toda la humanidad ya se extinguió.
(... Una persona sigue excluída, ¿sabías?)
Esa voz es la de una chica que nunca pensó que pasaría por su cabeza.
En ese caso, no queda más que una sola respuesta.
Aquella voz es... La de la muerte.
Exactamente, se puede decir que esa es la "Voz de las Almas", la voz emitida por aquellas almas que perdieron sus cuerpos y continúan perdidas en el mundo.
Normalmente, la muerte guía a las almas hacia el Inframundo. En ese lugar, se clasifican los pecados y pueden ser seleccionados para ir al Infierno o, tal vez, al Paraíso... Pero debido al efecto de la destrucción causada por Castigo, esa estructura ya no funciona más.
El límite entre el mundo y el Inframundo ya no existe. Si hubiera otra forma de decirlo, todo el mundo se convirtió en uno solo con el Inframundo. El gran Inframundo que se creó, presenta una gravedad única, que atrae a las almas a éste lugar. Al revés, las almas del pasado que ya habían estado viviendo en el Paraíso y en el Infierno fueron arrastradas hacia el mundo.
Las millones de almas que existían en Evillious... Ahora, esas se están congregando en este mundo.
A partir de ahora, ¿Qué es lo que pasará? Supongo que el chico no lo había pensado.
Tal vez, él suponía que Sickle actuaría en esta situación.
Por ésta razón, él... El alma de un sirviente, fue enviado a la Tierra.
Castigo ya fue lanzado.
Éste es el epílogo de este mundo, el "Tercer Período".
Sin embargo... Todavía no ha terminado.

******

Allen Avadonia sigue caminado por el desierto en el que se convirtió el mundo.
Él también de nuevo, al igual que los demás, existe como un alma que perdió su cuerpo.
Es una presentación bastante extraña ya que su cuerpo que lo mantiene en la realidad, sigue "caminando" pero, en realidad, Allen se encuentra en otro lugar donde no había estado.
Gracias a la gravedad que emanaba el Jardín Infernal sobre el mundo, le permitía a él danzar sobre el aire.
La joven que iba caminando poco detrás de Allen, comenzó a hablarle.
-Che... ¿No podemos descansar un poco?-
-¿Está cansada? ¿Su Excelencia Némesis?-
Allen, de mirada despreocupada, vió que Némesis se quedaba sin aliento y que de su frente goteaban grandes cantidades de transpiración.
-Exactamente. Esto es diferente a vos, ya que soy un ser humano viviente. Estoy cansada y tengo hambre.-
-¿En serio? Sin embargo, es una pena, mientras sigamos en éste desierto, parece ser muy difícil encontrar cómida. Sólo debe ser paciente.-
-Jaaa...  A éste paso, tal vez muera de hambre.-
-¿Sabe que al decir eso es imposible, verdad?-
Némesis, ahora mismo, es la única que logró sobrevivir en este mundo y, además, es un ser inmortal.
Sobre esa razón, se convirtió en algo complicada pero, resumiendo, se puede decir que ella firmó un trato con un demonio, convirtiéndola en una "Contratista del Pecado". No puede suicidarse, ya que la única manera de asesinar a personas que contrataron con un "Demonio del Pecado" es que sea otro contratista.
Ella pudo sobrevivir a la destrucción causada por "Castigo" debido a esa influencia.
Inmediatamente, al ignorar que Allen va siguiendo, Némesis terminó sentándose en ese lugar. De mala gana, Allen también paró de caminar.
 -Si hacemos ésto antes, tal vez sea la forma de morir más rápida. De todas formas, sólo me convertiré en un alma como vos. Por eso, por el momento, deberías considerarlo.-
-¿A qué te refieres?-
-Yo sigo viviendo debido al contrato que hice con el "Demonio de la Ira"... Seth, ¿verdad? Si ese fuera el caso, si aceptara cancelar el contrato con él...-
-Si tienes esa intención, hay que hacerlo saber a él también. Por como estuvo mantenido el contrato... Tal vez él pensará algo a su manera.-
-Nooo... Tal vez, sólo no quiera molestarlo. De ésta manera, estaré disfrutando hacerlo sufrir, a ese maldito psicópata.-
Hasta hace poco antes, Seth viajaba junto con ellos, pero él, Gumillia y Michaela dejaron de acompañar a Allen. Tal parece que, cada uno, tenían cosas que debían hacer.
-Vamos, ¿Ya va siendo hora de que nos vayamos?-
Allen presionó a Némesis, pero ella no se levantaba.
-Todavía es muy pronto para parar de descansar.-
-No hay que estar preocupándonos mucho del tiempo libre. Por el momento, la crisis pasó, pero todavía no puedo imaginar cómo será el mundo después de ésta.-
-Más que ésto, no parece que vaya a pasar algo malo.-
-Si ese fuera el caso, entonces no hay problema. Sin embargo, no me parece que, por como están las cosas, la situación del mundo sea buena.-
Al observar que Allen mantenía una mirada con una voluntad firme, Némesis exhaló un fuerte suspiro.
-... Allen. Estás diciendo que tu objetivo es "rescatar al mundo".-
-Si.-
-Sin embargo, ese no es mi deseo. ¿No lo has olvidado verdad? Fui yo quien destruyó al mundo.-
La autora de haber liberado alrededor del mundo el arma destructiva, "Castigo"...
Eso es incuestionable, es la que está delante de Allen, Némesis.
-Es cierto que, en ese tiempo, yo estaba en un estado de confusión mental... Pero, desde mi punto de vista, yo deseaba hace mucho tiempo destruir al mundo. Éste no es el final que estoy deseando. Pero, para ser exacta, de ninguna manera me arrepentiré de lo que hice.-
-... ¿Esa es tu opinión como "Némesis"? O tal vez...-
-...-
"Némesis Sudou", es uno de los nombres que ella tiene. Al principio, Allen dudaba un poco sobre por cual nombre debería llamarla, pero, eventualmente, al final ella decidió llamarse así misma como "Némesis".
-...Bueno, está bien. Pero, Némesis, tal vez lo estás malentendiendo un poco.-
-¿...?-
-Yo tengo un objetivo diferente al de regresar al mundo como era antes.-
-¿Qué?-
Sobre eso, Némesis se quedó un poco inesperada.
-Mi deseo y tu deseo... Sin duda, creo que no son tan diferentes.-
-... Que sentimiento tan desagradable.-
-¿Qué?-
-Te pareces un poco a Behemo.-
-Si fuera así, se podría decir que vos y yo nos parecemos aún más.-
Mirando a Allen calmado diciendo eso, Némesis se muestra más y más incómoda.
Cuando ella comenzó a levantarse, dijo ésto mientras se limpiaba la tierra de su pollera.
-Está bien. Ya va siendo hora de que nos vayamos.-
-Si.-
-Primero que nada, el lugar que hay en el Bosque del Árbol del Milenio... Haremos una parada en el "Teatro del Mal", y despues...-
-Planeo ir al antiguo lugar de Lucifenia.-
-Estás emocionado por encontrarte de nuevo con tu amada hermana mayor, ¿no?-
-... Así es.-
-Bueno, está bien de todas formas. También estoy pensando en querer hablar un poco con ella. Como Némesis... Más o menos ¿Puede ser que es la persona que salvó mi vida?-
-¿Ya te diste cuenta?-
-Sólo es una suposición. Es una sensación, desde que vine a este mundo, por esa apariencia que tenés. Pero, tal parece que no me estaba equivocando con eso.-
-Si. Postman... Su verdadero nombre, Lilith Balledold, era, sin lugar a dudas, la forma reencarnada de mi hermana mayor, Riliane.-
Al escuchar eso, Némesis puso sus manos en sus mejillas, al sentir algo de nostalgia.
-... Ya veo. No era una simple ambición personal de ir a encontrarme con Riliane.-
-Con respecto a esa sustitución, es un poco difícil de explicar. Sin embargo, dentro de mí, todavía no encuentra una respuesta. De todas formas... Continuemos avanzando.-
Una vez más, Allen comenzó a caminar.
Lentamente, Némesis lo acompañó detrás suyo.
Mientras caminan, Némesis, involuntariamente, pone su mano sobre la funda de su pistola de su cadera. En ese lugar... Ella siempre dejaba guardado su revólver favorito. Como dato curioso, una vez que el cuerpo explotado de Némesis resucitó, esa cosa que utiliza también regresó junto a ella.
(Sorpresivamente, es bueno para la reunión... Pero no creí que Seth ayudaría con eso.)

Se podría decir que mil años, es una historia muy larga.
Ésta historia... En éste viaje, ¿La humanidad habrá dejado algo atrás?
Para encontrar esa respuesta, Allen, Némesis, incluso las almas de todos que merodean por el mundo, nadie lo sabe.
Sin embargo...
No, por eso mismo.
Dentro del corazón de Allen, susurró suavemente.

Iré a encontrarme con vos.

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